Ya no estoy tan enojada como lo estaba hoy a la 130. Me alteró demasiado la forma en la que los humanos (ay, cómo quisiera no formar parte de ellos en este momento!) son tan hipócritas, y gozan de fijarse en los errores de las demás personas. No niego que yo lo haya hecho, porque sería mentir. Pero jamás lo he hecho con maldad. Nunca como lo oí decir de las bocas de quien menos yo pensaba que podían ser así. Y dicen que en BI hay puros genios. Qué mentira. Y yo que quería formar parte de eso. Hoy, me alegro de que no sea así (ok, admito que me alegro sólo parcialmente).
¿Cómo pueden ser tan prejuiciosos, tan hipócritas? ¡¿cómo, por Dios?! No lo entiendo. Y de veras que yo había creído en su cara falsa (como siempre, Emi no aprende). Y qué sorpresa me voy dando cuando empiezan a hablar mal de una de las personas que más amo en este mundo. ¿Cómo se atrevieron a hablar así de ella, sin siquiera tener argumentos para ello? ¿Cómo, Dios Mío, dime cómo? Dime, porque yo solita no lo entiendo. ¿Cómo se puede hablar tan mal de alguien que no se conoce? ¿Cómo se burla alguien de algo que no sabe porqué pasó? Explícame porqué la gente se divierte hablando mal de las demás personas... dime, Dios. Dime porqué algunos humanos gozan a costa de otros. Porqué prejuician. Pero más que todo... dime porqué son hipócritas. ¿Lo hacen por lo mismo que yo, Señor? Sabes que yo no me considero hipócrita... pero hay cosas a las que, por debilidad, no puedo decir no. No puedo ser pinche con la gente. Dime, Señor, ¿lo hacen ellos por lo mismo? ¿Son ellos tan débiles como yo? ¿En eso sí somos iguales? Explícame, Dios.
Ay, Dios. Lo sé. A veces soy muy exigente, ¿verdad? Haz de estar muy ocupado recibiendo al Papa por allá arriba, así que sólo quería decirte que no entiendo a la mayoría de tus hijos. Supongo que para eso estás tú... ¿tú los entiendes, Padre? ¿nos entiendes, a tus hijos? Ay, Padre. A veces creo que esta empatía que me has dado, sólo hace estragos... pero confío en tí. Confío en que tú me das todo lo que necesito para ser feliz, en todo momento. Y agradezco, de antemano, lo que siempre ha estado ahí para mí, pero no he visto aún. Gracias por escuchar a una de tus hijas frustrada por sus hermanos. Gracias por siempre estar ahí, Dios. You rock!
Y siento si ofendí a alguien allá afuera por hablarle tan directo a Dios. Pero, pues, así le hablo yo; así yo sé que me escucha. No creo que un Ave María o un Credo hubieran podido transmitirle a Dios todo lo que yo tenía que sacar en el párrafo anterior.
En fin, para los que dudaban de mi creencia en Dios, sepan que sí creo en Él. En lo que no creo es en la Iglesia. Whatever. No estoy de un humor sano para andarme metiendo en temas de religión. Demasiada polémica por hoy.
En las buenas cosas del día, me la pasé muy bien hoy. En muchos aspectos: sunshine, mis amigas, mis dibujos, mis pensamientos (bueno, por lo menos hasta la 130) y , qué decir? Fue un día muy bonito. Cada día me doy más cuenta de que soy tan... tantas.
Es decir, que hay tantas cosas en mí que quiero dar. Hay tantas Emis que coexisten en mi cuerpo y quieren salir y darle todo al mundo. Regalarlo todo para poder ser felices ellas y los que las rodean. Y es que realmente, no son varias Emis, soy sólo yo. Pero me gusta denominarlas, así como lo hacen los humanos. Jaja, me nació una risa sincera en este momento. A veces no sé si soy fácil de descifrar o impredecible. Tal vez ambas. Bienvenidos al mundo Géminis.
En fin, me voy. Me voy contenta porque Dios me escucha y porque me he desahogado. Saludos a los lectores, y a todas las personas que viven en mi corazón. Ya vieron cómo me pongo cuando alguien habla mal de ustedes! Sólo que ojalá no doliera tanto, pero whatever. Let us live, for there is only one life with memories! n__n Sonrisas a todos!
Oyendo: Shout it out loud-- KISS
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