"--¿Vives?-- preguntó. --A veces-- contesté".

Bueno, no sé por qué razón tengo tantas ganas de escribir. Debería de usarlas para terminar mis cosas de español. Whatever. (Sí, el whatever es la palabra del mes xD).

En fin, hoy tengo ganas de filosofar. Pensar, reflexionar, y demás sinónimos.

Hoy pensé mucho en lo que pasó el Lunes (lo del ramo de flores en mi puerta). Y, cada vez que lo pienso me hace sentir tan mal. Yo sé que no es totalmente culpa mía (los dos compartimos algo de culpa). Pero me siento más mal porque, yo sé que debería importarme. Yo me pongo en su lugar y me pregunto "¿qué fue lo que pasó con nosotros?"... de hecho, desde mi mismo lugar me lo pregunto. Y concluyo que fue inevitable. Para cuando me dí cuenta de que ya no lo quería... era demasiado tarde. Y, por muy pinche que suene, no me arrepiento de no haber luchado por esa relación. Yo ahora sé que él no era para mí... creo que siempre lo supe. Es demasiado mayor. Y no es que la edad importe, pero el tipo de compromiso que él quiere (fuera del mero placer carnal), es algo que yo no puedo ofrecer. Tengo 18 años, no voy a casarme ahorita. Hay muchas cosas que quiero hacer antes de eso. Pero sé que él no lo hubiera permitido, lo conzoco demasiado bien. Sería genial encontrar alguien con quien hacer tus locuras, alguien que te ayudara a conseguir tus sueños, y tu los de él; alguien que supiera cuando ser serio, pero que te siguiera la onda en tus insanidades, así la vida de casados sería toda una party xD Whatever, soy muy idealista, por cierto, se los mencioné? xD

El punto es, que este chico no es así. Él me pide... me exige mucho. Me pide compromiso, devoción, idolatría. Y yo podría dárselo, no hay problema. Pero cuando se empieza a meter con mis sueños, tenemos issues. Puedo comprometerme, puedo tenerle devoción, incluso podría dedicarle toda mi atención (cosa complicada para la niña verde e hiperactiva xD). Pero ya no voy a dejar que nadie pase por sobre mis sueños. Enough. Si yo me dedico a alguien, espero (sino lo mismo) por lo menos un poco de lo que estoy dando. Y eso él no lo entiende. Para él sólo era yo en SU vida. No era NUESTRA vida. Sólo era una Emi, sin vida, pegosteada con cinta en la vida de alguien más.

Yo me dí cuenta de todo esto, pero lo seguía queriendo. Hasta que dejamos de hablar. Cada vez menos. Menos. Menos. Hasta que nunca hablábamos. Y después de un año, pretende que yo sienta lo mismo, y no conforme con eso, quiere casarse!? Viejo enfermo, qué le pasa?! Más bien, ¿qué me pasa a mí? No sé. Me freakeó demasiado que llegara tan de pronto a pedirme eso. Y me sigo preguntando: ¿Porqué tomó por un hecho el que yo siempre lo iba a querer? ¿Porqué no hizo nada para que eso realmente pasara? ¿Porqué no me hizo caso cuando me tenía enfrente?

Hoy día no me arrepiento de nada, sólo me siento triste. Triste por él, porque no tiene culpa mayor a la mía, pero él sufre y yo no. Es la verdad, aunque suene pinche. Yo no sufro por él. Lo hice en algún momento, pero ya pasó. Dios, espero que lo ayudes una vez más... y por favor, dime si debería sentirme así o no. Ayúdame, Dios. No sé hasta que punto mi sensibilidad se pasa de donde debe. ¿Hice lo correcto?... ¿hay casos en que hacer lo correcto hace sufrir a otros? Dime, Dios.

Oyendo: Kissing the Shadows-- Children Of Bodom